::AUTODEFINICIONES POR ESCRITO ::
AUTOEXPLORACIÓN
¿Quién soy? Pregunta o afirmación; ninguna nunca precisa, nunca perdida. Búsqueda constante, prisión frustrante.
Sin cara, máscaras rotantes, días que juzgan cuál de mis escudos he de usar; soy la almohada que las garras despedazan, soy el miedo que me doy, soy el objeto amado, la ilusión de entrañas compartidas, el odio de mi origen, el desprecio del engañado.
La carne, las entrañas en donde vive Dios; soy la imagen, la interrogante… No soy nada para el mundo, más todo para él mi universo, el cerebro que se comen los gusanos de la duda, los ojos llorosos de cada noche, el grito atorado en el fondo del alma, la absoluta soledad de mi estrella. Soy el olvido de los amigos, el enemigo, el peligro. La noche de mis noches, soy tanto que jamás seré nada. Soy la nada.
Georgina Mercedes Arriaga Arana
20LDPM
soy…
soy un boceto mal planteado,
lleno y atascado de colores mal mezclados,
pero en extremo diferentes,
un cubismo
con la boca en el cráneo y la lengua en las manos
mi cabeza es una rockola , llena de pavarotti , pinck floyd y dj tiesto ,
que dan ritmo al hoyo negro que tengo por cerebro,
absorbe ideas e imágenes y las congela en el tiempo
mi reloj biológico esta de cabeza ,
duermo por el día,
y revivo por la noches
llenas de estrellas que uso de pinceles
y sonidos para mis pinturas durante el amanecer vampiro
mis ojos son el microscopio
que huele los engranajes de la realidad
me detengo y observo como el caso
es un logaritmo basico,
pero hipercomplejo
saberlo me suicida…
mi cuerpo está entumido por los múltiples desvelos ,
hablo solo
me río de mí en el espejo
mientras mi reflejo me cuenta chistes negros
articulo palabras que salen de mi interior
como burbujas de licor de ajenjo , verdes y fugaces.
mi corazón de metal ahora es un escudo vikingo
que porto con soberbia postura .
mis oídos son un par de bocinas que emiten un aria de guerra
y mi nariz un micrófono sensible que escucha olores
casi siempre mezclados con tabaco barato
en mi memoria hay una maraña de cabellos, rubios , castaños y pelirrojos
todos con perfumes femeninos
y en mi interior hay algo que como carga terrorista amenaza con explotar, tic, tac, tic, tac, de nuevo tic y más tac…
Agni Arez Mancera Ch.
20LDPM
AUTO DEFINICIÓN
Trato de describirme, trato de decir mi nombre, pero a la vez no quiero que nadie se entere; trato de no recordar que algo o alguien me hace falta, y que no se remplazará con nada ni con nadie.
Trato de no verme tan sola con esa ausencia de algo o de alguien que no me deja y nunca dejaré. Este recuerdo, o hueco, vivirá conmigo para nunca olvidar que algo o alguien necesita que yo los recuerde. A veces, después de muchos años, llorar llega a ser una última opción de aquel día que todo cambió, y recuerdo que alguien me dijo que es más triste vivir olvidado a morir mil veces y ser recordado.
A veces me doy cuenta de todo lo que me falta por vivir; lo viviré de aquellos recuerdos que a veces trato de no recordar, y me doy cuenta de que no quiero olvidarlos… A veces tengo rabia del momento en que logro ser débil, y eres tristeza en mí: no hay un día que no recuerde tu nombre. Voy a cerrar los ojos y tapar mis oídos, y verte, ya que no tengo tiempo de acumular nostalgias.
Avelina Cisneros Sánchez
20 LDPM
MI MUERTE VIVIENDO
Estoy y no estoy,
Vivo y muero,
Existo y desaparezco,
Respiro y muero,
Vuelo y tropiezo,
Camino y me ahogo,
Te amo y resucito,
Te veo y vivo,
Despierto y sueño.
Estoy viva pero me siento muerta; hay días en los que simplemente desaparezco pero todos me ven, camino viviendo pero siento muriendo; en donde respiro muerta, sin sentir nada, sin sentirme viva, en donde te veo con los ojos cerrados; dime por qué estás muy dentro, por qué me hablas sin decir palabra alguna; ya no me importa lo que pase conmigo, esto parece verdad para mí, está es mi vida y mi muerte, mi mundo y mi cuarto.
Sí, es todo esto, pero es mi verdad, en donde las palabras no llegan y los hechos sólo me dañan; hay vino, hay sangre; sí, los mismos que corrieron por aquella navaja cuando dejé de existir, cuando dejé de sentir y cuando dejé de respirar viviendo.
Sólo quiero un pedazo de mundo para mí y un pedazo de vida para mí, para malgastar y mal vivir; si, perderme entre la droga de la muerte, más vale que me empiece a portar muy mal a ver si así me atropellan y me ahorran el sentirme criminal. No es que me importe que mi vida no sea bella; además, te deja muchas huellas y esas las tendrás de por vida, que en la muerte te marca.
Viajo en silencio, escuchando mi respiración, viviendo y muriendo a cada paso que doy; está es mi vida y mi muerte, en donde no sé en realidad si vivo muriendo o muero viviendo, en donde la vida y la muerte son una.
Lucero S. Orta Vázquez
20 LDPM
Redacción Publicitaria
un complejo algoritmo
Describir a Rodrigo Tovar es tan fácil como descifrar un complejo algoritmo, puesto que no sólo es cuestión de señalar los aspectos físicos, tales como unos ojos pequeños, una nariz bonita o fea o unos labios sexis, que en conjunto y aderezados con unas grandes pestañas sólo dan como resultado nada.
Describir a Rodrigo es describir un alter ego llamado s.one que se encuentra presente en todos los instantes de mi vida
Él le dicta la forma de hablar, la forma de mirar, de relacionarse, de contestar.
Él es quien dicta las reglas, las que debemos seguir y cuáles debemos fracturar; cuáles son flexibles
El dicta el autfit que utilizaremos el día de hoy y qué acciones en el día llevaremos acabo.
Todo mundo critica la imagen que muestra sin darse cuenta que en realidad no es la parte mala de la historia, sino todo lo contrario: es quien tiene en reposo a la bestia
Él sí es capaz de interactuar con todo tipo de personas y a cualquier nivel
Lo puedes cuestionar y contestará, lo puedes incitar y responderá, pero nunca lo puedes confundir con Rodrigo
Puesto que ese nombre sólo aparece cuando cruza la puerta de entrada de la casa; el resto del día sólo rimas y vida.
Rodrigo López Tovar
Grupo: 20 LDPM
¿Quién soy yo?
Divagando en el entretiempo de angustias y trivialidades me preguntaron: ¿
quién era y por qué soy así? No sabía hacia dónde voltear. Si mirar atrás y buscar aquel yo guardado en el instante de los recuerdos. O atravesar esa pequeña brecha qué solía soportar mi camino.
Nací envuelto entre amor y fraternidad. Guardado en la pasión de mis padres y la ternura de mi hermana. Siguiendo, aprendiendo y una que otras veces tropezando y llorando, fui madurando, paso a paso. Buscando la ideología que más se adaptara a mi ser. Esa razón que todos buscamos, que algunos encuentran y otros pierden. Qué más da si la volvemos a buscar, si va a ser la esencia de nuestra vida.
Y otra vez estuve así. Buscando ese engrane que encajara perfectamente e hiciera funcionar la energía de mi cuerpo. Es parte de la balanza que sabe a donde se inclinará y se quedará estacada por ratos eterno de aprendizaje y experiencias puras.
Ese soy yo. Un libro que se encuentra en el clímax de su historia y busca su mejor colofón.
Ricardo Jesús Macedo Martínez
20LDPV
¿Quién soy?
Soy Ana, la persona más malhumorada que podrás conocer jamás: tan paciente como un toro en Pamplona… Pero, eso sí, puedo ser muy alegre (y hasta simple).
Sí, así soy, sincera hasta decir basta (cosa que a veces me mete en algunos problemas), y fuera de lo común; sí, porque común no es igual a normal, así que seria anormal, algo loquita.
Recapitulando: anormal, loca, histérica enojona, gruñona, todo eso y mas, en contra de todo y a favor de lo mío. Eso es lo que diría cualquier persona como primera instancia; claro, si no me conoces bien esa es la única imagen que tendrías de mí, pero también hay que mencionar las cosas positivas, porque si no qué miedo.
Pues, no sé cómo empezar; de lo único que sí estoy totalmente consciente es de que soy una persona muy sencilla y que puedo ser feliz con gran facilidad. Aunque sea difícil de creer puedo ser sentimental, tierna, cariñosa y dulce, pero, eso sí, no con mucha frecuencia, ni con cualquiera (por eso no muchos conocen esto de mí… ¡jajajaja!)
Pues sí, así soy: EXTRAÑA, como tú o cualquiera a tu alrededor.
Ana Laura Quevedo Casas.
20LDPV
